miércoles, 14 de diciembre de 2011

Día 2

Bueno, nunca hubo un día 1 pero como todo en esta vida es inesperado, vamos a empezar por el día 2...


Como dije en la primera entrada, voy a escribir todo lo que paso en mi día, como si fuese un diario intimo.
Me levanté. Depresión. Había decidido ir al trabajo de mi mamá, asi estaba rodeada de personas pero finalmente mi mamá decidió quedarse conmigo en casa. Estaba mal. Últimamente me sentía sola. Me estaba volviendo loca, literalmente. Me sentía perseguida, escuchaba voces, loca, loca, loca, enferma. Si, todo eso paso en un par de días. Después me quede como una hora en la cama viendo tele mientras mi mamá trabajaba en la computadora. Luego decidimos jugar al Trivial Pursuit (nos encanta jugar a ese juego y nos divertimos con las preguntas) y nos avisan que van a venir a arreglar el aire acondicionado (ALELUYA!). Tocan timbre. A pesar de la inminente presencia de estos hombres, seguimos jugando y riendo con el juego. Se fueron. Ese fue uno de los momentos en el que te gustaría revivir esas épocas en que tus padres jugaban con vos, como si nada más importara. Back to reality. Suena el celular de mi mamá. Bla bla bla bla... Juego olvidado. Se acercaban las 12, asi que empecé a preparar el almuerzo. Cuando volví de la cocina, mi mamá me dijo que cambió el celular y que se lo van a traer en los próximos días hábiles. Felicidad. Me gusta ver a mi mamá feliz y que cada tanto se haga regalitos para ella misma (gracias por todo ma, te mereces esos pequeños gustos). Despúes almorzamos felizmente como en los viejos tiempos(?, mentira, nunca hubo viejos tiempos en los que almorzábamos juntas los días de semana (nunca). Tic, tac, tic, tac. A las 14:30 ya estaba en el auto para ir directo al consultorio de mi mamá. Hace mucho tiempo que no iba a este consultorio (la última vez que fui fue este año para que me vea una compañera de mi mamá por problemas de salud). Fue lo mejor. 6 horas rodeada de pequeñas criaturas alegres, cantando, llorando, gritando, pequeños seres muy inteligentes. Esos pequeños monstruitos fueron capaces de sacarme una sonrisa en este día tan gris. Inexplicable lo que me hicieron reir. También tuve tiempo para reflexionar... 


Tuve tiempo para pensar en todo. Me di cuenta de que hay gente que no me tiene en cuenta mientras hay otras que tal vez, a pesar de que pasan los años, me quiere mucho. Pero después pienso, no voy a ser una mierda como persona vengandome de todo lo que me hacen, NO. Hay que ser mejor que eso, no? Bueno, tal vez me confunda. No, no creo. Hay que demostrar que uno es mejor que los otros, o sea, mejor persona. Eso es lo importante. O directamente no hay que encariñarse mucho con la gente, asi no te decepcionan y no te hacen sufrir. Después empecé a pensar en mi futuro. No hay que hacer planes apresurados. No hay que pensar o en planear en cosas que todavía no sabes si van a pasar realmente. Hay que dejar que fluir las cosas. Vivir el momento. Y así pasaran las horas hasta que se hicieron las 20 horas...


Ahora estoy en casa, mirando Salven el Millón. Pienso en esa gente que se humilla en frente de todo el mundo con un cartel en la frente que dice "Hola, soy un estúpido que hace cualquier cosa para ganar dinero". Encima es obvio que van a perder.
Y para finalizar les voy a dejar una quote de mi inspiración:


“It doesn't matter who you are, or where you come from, or how much money you've got in your pocket. You have your own destiny and your own life ahead of you.” 



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